Los ligamentos son tejidos fuertes y flexibles que conectan los huesos entre sí, mantienen las articulaciones estables y ayudan a que se muevan correctamente.
Un esguince de tobillo se produce cuando los ligamentos del tobillo se estiran o se rompen.
Más acerca de su lesión
Hay cuatro grados de esguince de tobillo según la Clasificación de Ottawa:
- Esguinces grado I: los ligamentos se estiran. Es una lesión leve que puede mejorar con un poco de estiramiento suave.
- Esguinces grado II: los ligamentos están parcialmente rotos y posiblemente se necesite usar una férula o un yeso.
- Esguinces grado III: los ligamentos están totalmente rotos. A menudo se necesita cirugía para esta lesión grave.
- Esguinces grado IV: luxación de la articulación.
Estos tres últimos tipos de esguinces con frecuencia están asociados con un desgarro o ruptura de vasos sanguíneos pequeños, lo cual hace que la sangre se filtre a los tejidos y cause una coloración negra y azul. La sangre puede no aparecer durante varios días y generalmente se absorbe desde los tejidos al cabo de dos semanas.
Si el esguince es más grave:
- Usted puede sentir dolor fuerte y tener mucha inflamación.
- Puede que usted no sea capaz de caminar o que caminar le resulte doloroso.
Algunos esguinces de tobillo pueden volverse crónicos (de larga duración). Si esto le sucede, su tobillo puede seguir:
- Presentando dolor e hinchazón.
- Estando débil o “doblándose” fácilmente.
Qué se debe esperar
El médico puede ordenar una radiografía para buscar una fractura osea.
Para ayudar a que el tobillo sane, el médico puede tratarlo con un aparato ortopédico, un yeso o una férula y puede suministrarle muletas para caminar. Le pueden solicitar que coloque sólo una parte o nada de peso sobre el tobillo afectado.
Cuidados personales
Usted puede disminuir la hinchazón:
- Descansando y no poniendo peso sobre el pie.
- Elevando el pie sobre una almohada o por encima del nivel del corazón.
Aplique hielo cada hora mientras esté despierto, 20 minutos cada vez y cubierto con una toalla o una bolsa, durante las primeras 24 horas después de la lesión. Después de las primeras 24 horas, aplique hielo durante 20 minutos 3 o 4 veces al día. No aplique el hielo directamente sobre la piel. Debe esperar al menos 30 minutos entre cada aplicación.
Medicamentos para el dolor, como el ibuprofeno o el naproxeno, pueden ayudar a aliviar el dolor y la hinchazón. Usted puede comprar estos medicamentos sin necesidad de receta.
- Hable con el médico antes de tomar estos medicamentos si tiene cardiopatía, presión arterial alta, enfermedad renal, enfermedad hepática o si ha tenido úlceras gástricas o sangrado interno en el pasado.
- No tome más que la cantidad recomendada en el envase o más que lo que el médico le aconseje tomar.
Durante las primeras 24 horas después de la lesión puede tomar paracetamol (Tylenol y otros) si el médico le dice que es seguro hacerlo. Las personas con enfermedad hepática no deben tomar este medicamento.
Ponerse activo
El médico le dará ejercicios para fortalecer el pie y el tobillo. Hacer estos ejercicios puede ayudarle a prevenir esguinces en el futuro y dolor crónico en el tobillo.
En caso de esguinces menos graves, es posible que pueda volver a sus actividades normales después de unos pocos días. Para los esguinces más graves, esto puede tardar varias semanas.
Hable con el médico antes de regresar a la práctica de deportes intensos o a las actividades laborales.
Cuándo llamar al médico
Usted debe llamar al médico si nota cualquiera de las siguientes cosas:
- No puede caminar o el hecho de caminar es muy doloroso.
- El dolor no mejora después de aplicar hielo, hacer reposo y tomar analgésicos.
- No siente mejor el tobillo después de 5 a 7 días.
- Sigue sintiendo el tobillo débil o éste se dobla con facilidad.
- El tobillo está cada vez más descolorido (rojo o negro y azul) o presenta entumecimiento u hormigueo.